New York Knicks: ¿Rumbo perdido?

Es una de las preguntas que se formulan el 95% de los sufridores seguidores que noche tras noche acuden al Madison Square Garden a contemplar como el balance negativo de 18-45 va en aumento.

Sin duda a la cabeza de este barco perdido y sin rumbo tenemos que observar la figura de su capitán, Isiah Thomas, legendario base en los años 80 de los míticos Bad Boys de Detroit, cuyo fracaso tanto en los cargos de GM y de entrenador es más que evidente. Dejando de lado sus problemas personales, en los que está implicado en escándalos de acoso sexual, tiene que hacer frente a manifestaciones de seguidores enfurecidos que piden su cabeza. Pero, ¿Por qué se ha llegado hasta esta situación en una de las franquicias más emblemáticas de la NBA?

La lamentable gestión realizada en los despachos ha conducido a que los Knicks sean el equipo con la plantilla más cara de la liga, pagando en salarios cerca de 130 millones de dólares, se pudiese entender dicho gasto si observásemos grandes figuras de la liga entre su plantilla, pero no es así, en ella nos encontramos jugadores veteranos, con unos contratos multimillonarios, esa gran gestión ha permitido el desembarco en los últimos años de jugadores como Marbury, Randolph, Quentin Richardson, Malik Rose, Steve Francis, Kurt Thomas, etc…por suerte en esta nave habido algunas salidas, como por ejemplo la de los dos últimos. Este hecho sumado a unas elecciones del draft más que cuestionables, y a unos traspasos sin mucha lógica ha convertido a los Knicks en la franquicia con la peor plantilla de toda la liga.

Esta brillante gestión se ve reflejada noche tras noche en los pabellones…Isiah Thomas ha sido incapaz de controlar un vestuario plagado de jugadores cuyos egos chocan constantemente no solo entre ellos, sino también contra la figura del entrenador, no es de extrañar por tanto, las numerosas broncas públicas, bien en declaraciones a la prensa bien en la misma cancha, como los desplantes y desafíos a los que se ve sometido.

¿Qué futuro se puede esperar mientras Isiah Thomas siga desempeñando las funciones en los cargos en los que está? La verdad es que ninguno. Lamentablemente los seguidores de los Knicks supongo que seguirán sumidos en la resignación y la depresión durante cierto tiempo, dado que Isiah ha confesado en numerosas ocasiones a la prensa que el no se bajará del barco hasta ver cumplido su objetivo: hacer campeones a los Knicks. Una gran noticia para que el rumbo que este barco a la deriva se corrija sería la dimisión o cese en el cargo de Isiah Thomas…